REDACCIÓN | Emiliano Caballero
Valle de Bravo, Méx.- Familias de competidores se reunieron desde temprano en los alrededores de la Parroquia de la Asunción de María para vivir un evento deportivo que se ha vuelto tradición en la comunidad.
En diferentes categorías, niños, jóvenes y adultos disfrutaron de una mañana de emociones y alegrías. Sin embargo, eso no evitó que se vivieran también momentos de adrenalina entre los corredores.
Al finalizar las carreras, los 3 primeros lugares de cada categoría se dirigieron al podio para recibir una ovación y sus respectivos premios por su destacada actuación, cerrando una edición más de esta tradicional prueba deportiva.